Capitulo 41- Parte 1

Hola Hola!
Les voy a dejar una parte del capi 41, pero es solo una parte (La que a ustedes mas les importa XD *1313*) La otra parte a lo mejor la subo mañana o el miercoles, depende de cuanto haya avanzado en unos trabajos y una prueba de historia (>.<)
Cuidensee. Y mil gracias a las que entienden que hay compromisos que no puedo suspender, de verdad que me alegran el día y me dan puras ganas de escribir =D
Aquí va...
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Por fin! Por fin! Sentí que un auto se frenaba a las afueras de la cabaña. Frenó y partió, por lo que supuse que, si era él, había venido en Taxi. Subí al Segundo piso, Moría de vergüenza en esas pintas! Pero las ganas la superaban y me ponían ansiosa de estar con él… con el miserable egocéntrico que hizo que el mundo dejara de girar en su eje, dejara de girar alrededor del sol y que la luna desapareciera bajo la luz que iluminaba con tan solo una sonrisa, El mismo que me hundió en el juego del amor… ese juego que se juego con fuego…

Narra Bill
Vale, ¿Qué hacía aquí? ¡A ya sé! El pequeño diablillo engatusador que me cegó con su intenso fuego me había citado aquí. Bueno, en realidad, me dijo “Ven a la cabaña” y la única cabaña que yo conocía era esa, al menos que conociéramos ella y yo, por lo que mi instinto me dijo que fuera a la misma cabaña en la que habíamos compartido nuestra primera noche de novios.
Me quedé una milésima de segundo viendo desde afuera, ¿Qué me esperaba adentro? ¡¡¡Qué va!!! Eché a correr hasta la puerta, dominado por la necesidad de tenerla cerca de mí, donde la sentía tibia y segura entre mis brazos sin que nadie le hiciera daño. Frené a tiempo de no estrellarme contra la puerta y la abrí, la cerré a mis espalda y reinó el silencio en la cabaña…
Bill: (Tu nombre)! Amor! (Escuché sus ligeros pasos en algún lugar de la cabaña) Vamos amor!! Son Más de las doce!! Ven conmigo!!... Que aunque ganas tenga no voy a comerte!! Al menos no tan cruel (Imagine que si me estaba escuchando, estaría sonriendo igual de maliciosa que yo. Comenzaba a pensar que a lo mejor me había metido en la cabaña equivocada… Hasta que unas delicadas manos me taparon los ojos) Si no te llamas (Tu nombre) y eres un delincuente te juro que te arrepentirás (Bromeé. Esas manitos solo podían ser de ella, al menos solo conocía unas manos así de suaves y cariñosas)
Yo: Y que pasa si de verdad fuese un delincuente al que le pagaron por tu linda cabecita?? (Susurró en mi oído amenazante) O si le pagaron por violarte y robarte todo lo que tienes??
Bill: Hay un pequeño problema en esa amenaza, Una violación es contra la voluntad, (Sonreí) si alguien como tú lo intentara, sería con toda mi voluntad y más aún… sería incluso con la voluntad que no tengo… (Tomé sus manos con las mías, las retiré de mis ojos y me giré, dejando sus manos para poner las mías en su cintura)
Me encontré con tres cosas: 1) Ella estaba de pie en una de los peldaños de la escalera que llevaba al segundo piso, sin ese peldaño no hubiese alcanzado taparme los ojos y no habríamos quedado Cara con Cara a la misma altura. 2) Dios pero que traje!! Ella… ahí… frente a mí… pasando sus brazos por mi cuello y acariciándome el cabello sensual y suavemente. 3) La respuesta de mi cuerpo ante esa magnífica aparición, lo único que hice fue tragar saliva unas 3 veces, no pestañear ni una vez ni despegar mis ojos de su rostro (Pero la visión periférica me dejaba ver todo el traje) y por último, noté que, de repente, los bóxers me estaban apretados, muy apretados…
Yo: (Acercó su boca a la mía y me besó solo con los labios, obteniendo una respuesta un poco aturdida de parte mía) Tu cara es de fotografía (Soltó todo su aliento en mi boca, abultando aún más mis bóxers y dejándome más Shockeado aún!!) No piensas hacer nada?? (Volvió a besarme. Como salía yo de mi estado de estupidez??) O prefieres que nos sentemos a hablar??
Bill: (*Ni hablar!*) (Le agarré aún más fuerte de la cintura y la pegué a mí. No sé si lo imaginaba o de verdad pasaba, pero sentía que mis labios aun titubeaban por el shock. Recargué mi espalda en la pared, apretándola contra mi pecho y nuestros labios aún unidos. ¡Maldición! No tenía ni si quiera un poquito de fuerza de voluntad frente a ella! Ella podría decirme “Salta” y yo lo hacía, “Rueda!” y rueditas en el piso daría, solo por tenerla conmigo…)
La aupé en mis brazos como si fuera un bebé y la senté en la mesa frente al ventanal por el que se colaba la luz de la luna (No sé cómo llegue ahí, pero la cosa es que llegué) ella rodeó mi cintura con sus piernas mientras yo pasaba mis manos frenéticas por todo su pecho, su cintura, sus piernas… llevé mis manos a su espalda, donde se anudaba su corsé y tiré de la pequeña amarra, tirando uno a uno sus cordeles. Ella desabrocho uno a uno los botones de la camisa negra que llevaba, lento y acariciándome con sus manos hábiles. Se deshizo de mi camisa y yo tiré de la última amarra del corsé, dejando el pequeño vestidito azul amarrado solo de los broches del sostén. Quería desabrochar yo mismo mi cinturón y bajarme todo para poder tenerla más cerca aún, sin las ropas de por medio, pero sus pechos tenían hipnotizadas a mis manos. Hasta que, como si ella leyera mi mente, bajó sus manos de mis hombros y me desabrochó el cinturón, coló los tacos aguja de sus botas largas y negras por mi pantalón y los bajo…
Bill: Mmm… Salvaje (Murmuré, sacándome los zapatos a golpes, al igual que los pantalones)
Yo: Querías un premio??... Pues, aquí lo tienes (Con un movimiento fuerte apretó sus piernas en mis caderas, pegando mi pelvis contra la suya, soltando un gemido excitado de mi parte…
Le desabroché el sostén y el vestidito cayó, dejándonos a los 2 en tan solo bóxer y calzón. Con una mano agarré su cabeza, pegándola más a la mía, encajando sus labios con los míos a la perfección. Con la otra agarre una de las partes laterales de su calzón y lo deslicé por sus piernas… ella metió sus manos en mis bóxers, haciéndome sudar de pura aceleración y yo terminé de deshacerme de ellos, dejándonos a los dos desnudos…
Ella me apretaba con fuerza mi cabeza contra la suya, moviendo nuestras lenguas apasionadamente entre movimientos salvajes. Yo tenía mis manos puestas en sus caderas, apretándola contra mí... Coloqué mis manos en su cintura y la penetré, así como estábamos, ella sobre la mesa y yo de pie frente a ella… Me concentré plenamente en el roce de cada partícula de su cuerpo contra mí, sus pechos moviéndose en mi pecho, sus labios y los míos encajando perfectamente, sus piernas alrededor de mis caderas mientras yo la embestía con movimientos lentos y concisos… La afirmé bien contra mi cuerpo y la levanté de la mesa, con ella aferrada a mí… Con mis pasos largos y rápidos recorrí parte de la cabaña hasta que su espalda chocó fuertemente contra una de las paredes, haciéndola gemir de la fuerte y profunda embestida que le hice…
Yo: Salvaje… (Entre gemidos y besos, mientras yo subía y bajaba mi pelvis un poco más rápido)
Bill: Te pasa por… ponerte así de… sexy… siendo que hace demasiado… no te tenía conmigo… siendo mía…
Volví a tomarla y en volandas la llevé hasta la cama, la misma que la última vez que estuvimos allí estaba llena de pétalos de rosas que esparcían su olor por toda la habitación… Ahora esa habitación estaba llena del olor de ella, Su olor… el de su pelo, el de su perfume y mi propio olor de puro deseo… Nos lancé a ambos a la cama, quedando yo sobre ella, comenzando movimientos rápidos de pura necesidad, de sentirla más mía, saber que era yo quién estaba dentro de ella, que era mi esencia la que recorría su cuerpo… Sus suaves y rítmicos gemidos se acoplaban a los míos entre besos y respiraciones agitadas que dejaban escapar suspiros de nuestros labios… tomé una de sus piernas con mi mano, solo por sentir esa magnífica sensación de tenérsela entre mi mano mientras mis movimientos se volvían más rápidos y brutos… ya ni si quiera podíamos mantener nuestros labios juntos. Los dos teníamos la cabeza Semi-volteada hacia atrás por el placer, con las bocas entreabiertas dejando salir los gemidos y suspiros… Llevé mi boca hasta su cuello y comencé a besarlo y mordisquearlo con saña. Ella comenzó a gemir y suspirar más agitada provocando en mí la reacción más violenta de placer, embistiéndola más fuerte aún y más rápido, mientras mis dientes se entretenían en su cuello… Ella me levantó la cabeza y me besó en los labios unos minutos para luego levantármela y juguetear con sus labios y dientes en mi cuello y mis hombros… llevé mi cabeza hacia atrás, gimiendo…
De a poco nuestras energías disminuían, finalizando el momento, mientras que lo que menos quería era parar…
Bill: No pares… (La energía y velocidad de mis embestidas comenzaba a decaer. Pero mi excitación seguía intacta)
Yo: No lo haré… (Me giró de un solo movimiento, quedando sobre mí) Prefieres seguir?? (Entre besos, aún unida a ella)
Bill: Toda la noche… (La besé y la agarre de la cola, pegándosela más a mi)
Yo: Necesitarás algo así?? (Y en su mano meneó una botella Azul con plateado, en las que letras rojas rezaban “Red Bull”)
Bill: (Sin pensarlo se la arrebaté de la manos, la abrí frenéticamente y la devoré de un trago. Ella tomó una más lento y dejo caer unas últimas gotas en mi boca…) Te arrepentirás de haber hecho eso… (La giré bruscamente, quedando sobre ella)
Yo: No lo creo…
La noche iba a ser bien larga…